El Tyvek es un material fino parecido al papel, fabricado con fibras de polietileno, que tiene muchas buenas propiedades: es impermeable, resistente al desgarro, imprimible, ligero y de color blanco brillante. Es suave como la seda y muy liso. Los monos desechables para renovaciones o salas blancas suelen ser de Tyvek, y las cartas náuticas también suelen imprimirse en él. He aquí una bolsa bastante inusual hecha de Tyvek. Con sólo 82 gramos de peso, puede transportar hasta quince kilos de equipaje. Gracias a su material ligero y fino, la bolsa plegada cabe en cualquier bolso y en muchos bolsillos de chaqueta. Y como el material es tan blanco como un lienzo, es perfecto para crear tus propios diseños. Lo mejor es que utilices pinturas acrílicas o rotuladores acrílicos y colorees tu bolsa Tyvek como más te guste. Acabará teniendo una bolsa de deporte o de la compra única y muy práctica de la que no querrá prescindir.
Algunos consejos más sobre el cuidado: Si quiere lavar su bolsa Tyvek en algún momento, lo mejor es lavarla a mano con un jabón suave. A continuación, cuélguela y déjela secar; no la retuerza, centrifugue ni seque en secadora. Y, por favor, no la planche: el PE es un material termoplástico.
Y por último, pero no por ello menos importante: los tejidos Tyvek no deben utilizarse cerca del calor, llamas, chispas o en entornos potencialmente explosivos. Las propiedades físicas de Tyvek no se ven afectadas por el agua: Tyvek es igual de resistente mojado o seco en condiciones normales y a temperatura ambiente.